La nueva marca LÕK, inspirada para un público joven, ha entrado con fuerza en el mercado. Después de probar la pala de Mike Yanguas, en esta ocasión hablamos la gama FLOW, una serie de cuatro palas cómodas y manejables dirigidas para jugadores de un nivel intermedio-principiante: la Maxx Flow, la Carbon Flow, la Easy Flow y, finalmente, la Be Flow.
En concreto, con la colaboración de la jugadora y entrenadora Eva Herrador y Club Delfos, nos centramos en los modelos LÕK Carbon Flow e Easy Flow, las dos palas intermedias de esta colección.
Características de las LÕK Easy y Carbon Flow
Tanto la LÕK Carbon Flow como la Easy Flow son dos palas de forma redonda que ofrecen un gran control gracias a su amplio punto dulce situado en el centro y su balance medio-bajo.
Ambos modelos incorporan algunos detalles comunes, como por ejemplo, el corazón asimétrico tan característico de la marca, que permite un mejor reparto de pesos y, por lo tanto, un mayor equilibrio.
Sin embargo, pese a que pueden parecer muy similares, se diferencian en varios aspectos. En cuanto a su cara, están fabricadas con distintos materiales: la LOK Carbon Flow incorpora una fibra de carbono C6 que proporciona una mayor capacidad de potencia en ataque, mientras que la fibra de LOK Easy Flow es mixta y algo más blanda, siendo un compuesto más equilibrado.
Finalmente, también cabe destacar que la versión Carbon incluye un relieve en forma de líneas dispuestas en diagonal para jugar con los efectos, mientras que su hermana gemela tiene una superficie lisa.

Detalle de los modelos Easy y Carbon Flow de LÕK
Experiencia en pista con las palas de LÕK
Rendimiento de defensa:
Tanto la LÕK Easy Flow como la Carbon Flow son dos palas con las que nos hemos sentido especialmente cómodos en defensa, siendo ideales para aquellos jugadores que les gusta manejar el juego desde el fondo de la pista con algo más de tacto.
Uno de los aspectos que más no ha sorprendido de ambas palas ha sido su buen tacto y sensibilidad. El amplio punto dulce nos permite ejecutar con facilidad cualquier tipo de golpe, destacando especialmente su buen rendimiento a la hora de controlar el globo, buscando más altura y profundidad.
Tanto la Easy Flow como la Carbon son dos modelos muy ligeros que podemos mover con facilidad y sin realizar grandes esfuerzos, lo que también nos permite devolver pelotas más comprometidas y, por otro lado, evitar posibles lesiones.
Además, su buena capacidad de control también nos ha permitido tirar con efectividad golpes más complejos técnicamente como la chiquita, un recurso efectivo para poder caminar hacia la red.

Eva Herrador jugando con la LÕK Easy Flow en el fondo de la pista
Sin embargo, pese a tener un rendimiento muy parecido, las dos palas de LÕK ofrecen algunas diferencias. La Easy Flow nos da un plus de control, mientras que, por el contrario, la Carbon Flow ofrece algo más en salida de bola y en el uso de efectos, gracias su relieve.
Rendimiento en ataque:
En cuanto a su rendimiento ataque, resaltaremos que se trata de dos modelos muy equilibrados y adaptables para jugadores de un nivel más intermedio que aún no tienen una técnica tan depurada.
Igual que ocurre en defensa, estas dos palas de LÕK son realmente manejables. Su peso ligero nos permite moverlas con mucha facilidad en la volea, algo que nos ayudará especialmente en situaciones de intercambios rápidos en las que necesitamos reaccionar con más velocidad.
Por otro lado, tanto en la volea como en bandeja, son dos palas muy cómodas que ofrecen un excelente tacto, lo que nos permite controlar los golpes con mucha facilidad. Sobre todo, en el caso de la Easy Flow, con la que hemos sentido grandes sensaciones en cuanto a sensibilidad. En este sentido, también cabe destacar que su amplio punto dulce nos ayudará a dominar más el juego y reducir nuestros errores cerca de la red.
Finalmente, aunque tienen buena capacidad control, estas dos palas también rinden bien cuando buscamos algo más de potencia. Destaca especialmente la LÕK Carbon Flow, que gracias a su buena salida de bola ofrece mejor rendimiento en la pegada, por ejemplo buscando un remate potente.

Eva Herrador realizando una bandeja con la LÕK Carbon Flow
Conclusiones de las LÕK Easy y Carbon Flow
En conclusión, podemos afirmar que estas dos palas de la gama Flow de LÕK son muy adaptables a un público muy amplio, ya que son realmente manejables tanto para iniciación como también para jugadores que ya tienen un nivel intermedio.
Destacamos especialmente su buena capacidad de control, que nos permite ejecutar todos los golpes con mayor seguridad.