La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) anunció este viernes una medida que traerá alivio al sector tecnológico. Los smartphones y computadoras importadas al país estarán exentos de los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump, una decisión que busca mitigar el impacto económico sobre las grandes empresas tecnológicas y los consumidores estadounidenses. De acuerdo con el aviso, aa exención se aplica a los productos que entren a Estados Unidos o salgan de los almacenes a partir del 5 de abril.
Los smartphones y computadoras están exentas de aranceles
Entre los artículos que quedan exentos de los aranceles destacan smartphones, monitores de computadora y diversas partes electrónicas esenciales para la fabricación de dispositivos tecnológicos. Según el aviso oficial, estas exenciones aplican a los productos que ingresen a territorio estadounidense o salgan de los almacenes a partir del 5 de abril. La medida representa un respiro para gigantes tecnológicos como Apple, cuya producción de iPhone depende en un 90 % de China, según estimaciones de Wedbush Securities.

Iphone 16, disponible en Apple.
La exclusión también incluye componentes críticos como semiconductores y microchips, piezas fundamentales para la fabricación de dispositivos electrónicos modernos. Estos productos, altamente dependientes de fábricas asiáticas como Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), Samsung y SK Hynix, ahora podrán ingresar sin los recargos previstos, lo que podría mantener los costes bajo control en un mercado ya presionado por la inflación.
El sector tecnológico celebró la decisión de Donald Trump
El anuncio fue recibido con optimismo por expertos y analistas financieros. Según Wedbush, la decisión es “la mejor noticia posible para los inversores tecnológicos”. La firma destacó que empresas como Apple, Nvidia y Microsoft pueden sentirse más tranquilas tras este anuncio, aunque advirtieron que el proceso de negociaciones con China aún está en curso y podría extenderse durante varios meses. “Un gran paso adelante para que la tecnología de EE.UU. obtenga estas exenciones”, afirmaron en un comunicado.
Por su parte, Nintendo había mostrado preocupación por el impacto de los aranceles antes del anuncio. La compañía retrasó la preventa de su consola Switch 2 en EE.UU. para evaluar posibles aumentos de precios derivados de los gravámenes. Expertos habían estimado que, de aplicarse los aranceles, el costo de la consola podría haber aumentado hasta dólares desde su precio inicial de 450 dólares.
Posibles excepciones y el futuro de las negociaciones
El presidente Trump mencionó este viernes que podrían existir “un par de excepciones por razones obvias” a los aranceles generalizados, aunque aseguró que el 10 % sería el piso mínimo para la mayoría de los productos. Mientras tanto, la administración sigue avanzando en las negociaciones con China, un proceso que promete ser largo y complejo.
En este escenario, la decisión de excluir ciertos productos tecnológicos de los gravámenes no solo beneficia a las empresas involucradas, sino que también ofrece un respiro temporal a los consumidores y al mercado global, marcando un nuevo capítulo en la guerra comercial entre ambos países.