Él no quería, pero Santi Aldama fue a ser el hombre más buscado por los cámaras al final del intenso Warriors - Grizzlies, cabizbajo y con un evidente sentimiento de culpabilidad el español por un fatídico error que mandó al equipo de Stephen Curry a los playoffs y a Memphis al segundo partido del play-in (121-116). Con 5,4 segundos por jugar tras tiempo muerto y posesión para unos Grizzlies 119-116 abajo, Aldama se demoró demasiado en servir el balón desde la banda cometiendo la violación de los cinco segundos y el conjunto de Tennessee perdió automáticamente la posesión. Pero a favor del canario hay que decir que ninguno de sus compañeros supo ofrecerle pase.
Curry no perdonó desde la línea de tiros libres tras recibir falta inmediata para acabar con 37 puntos con un 6/13 en triples y catapultar a los Warriors hacia la primera ronda de playoffs, donde esperan los duros Houston Rockets del malvado Dillon Brooks. Castigados también por los 38 tantos de un pletórico Jimmy Butler, los Grizzlies se ven abocados a jugar el segundo partido del play-in el viernes ante el vencedor del Sacramento Kings - Dallas Mavericks de esta próxima madrugada.
Desmond Bane fue el mejor de Memphis con 30 puntos seguido de los 22 de un Ja Morant que desapareció al final con problemas físicos tras torcerse el tobillo. Aldama cumplió como siempre en una gran muestra de eficiencia desde el banquillo con 14 puntos, 8 rebotes y 2 asistencias, un 5/8 en tiros de campo y un 1/2 en triples. Pero su fallo se llevó toda su gran aportación de turno por delante.
Por lo demás, hay cosas que nunca cambian en la Bahía, con un Stephen Curry con ganas de montar jarana al final como toda la vida -pese a su lesión en el pulgar-, y lo fuerte que vuelve a soplar el viento con Jimmy Butler. El charlatán alero se prepara para ser a las orillas del Pacífico ese célebre ‘Jimmy de playoffs’ que alcanzó su pico especialmente a las orillas del Atlántico hace dos años, cuando llevó hasta las Finales a unos Miami Heat con Bam Adebayo y poco más.
La estrella de 35 años desglosó sus 38 puntos en un 12/20 en tiros de campo y un 2/4 en triples, haciendo picar a Memphis en esas fintas tan suyas con las que tan locos vuelve a los rivales. Los Warriors prolongan la vida de su dinastía con el sorprendente efecto Butler, aunque poco potencial aguafiestas más áspero que los Rockets del villano Dillon Brooks, deseando lucir su malvada mirada y su maquiavélica sonrisa para hacerle la vida imposible a Curry. Y es que de héroes se alimentan los villanos.
Los Grizzlies estaban 67-55 abajo al descanso pero llegaron al último cuarto con una desventaja de sólo 3 (91-94). Los problemas físicos de Ja Morant dejaron al base en sólo 4 tantos en el último parcial. Santi Aldama se equivocó, pero Morant, esta vez con el cuento de sus recurrentes lesiones, fue el que verdaderamente falló a unos Grizzlies que se ven en peligro: su proyecto podría quedar definitivamente estancado.