Luciano Spalletti está mosqueado. El seleccionador de Italia cree que hay un topo, un chivato, dentro del vestuario de la Azzurra y en el marco de esa sospecha se dejó ir en la sala de prensa, visiblemente molesto con un periodista, después de la agónica clasificación a octavos de final de la Euro ante Croacia (1-1).
Spalletti sospecha que se filtran cosas, alineaciones y demás. Así lo dijo después de que un periodista de 'Radio 24' le preguntara: "Señor, felicidades por la clasificación. Esa actuación y también el once inicial me parecieron, al menos a mí, un claro pacto entre el equipo y su entrenador. ¿Confirma esta impresión?". Y Spalletti no se mordió la lengua.
"¿Qué pacto? Tradúceme la palabra pacto. Siempre hablo con mis jugadores. Tengo que saber escuchar con los oídos y ver con los ojos. Parecía un equipo construido hablando mucho con los jugadores, ¿no? No es una interpretación, es así. Que haya alguien internamente que filtre cosas fuera es malo para la selección".
"¿Cuántos años tienes?", le pregunta al periodista. "51", le responde este. "Pues aún te quedan 14 años de mamadas para llegar a los 65, para llegar a mi edad... Hablo con los jugadores, claro. ¿Cuál es el problema? ¿Pacto para qué? ¿Pacto para los demás? Es un pacto para nosotros... Te lo han dicho y haces bien en repetirlo. No te tomes licencias que no son tuyas. Estas son las debilidades de los que cuentan cosas. Hay un ambiente interno y un ambiente externo y si alguien cuenta cosas internas, hace daño a la selección".