La fiebre por este calzado ha invadido el mundo de la moda y el confort, convirtiéndose en la opción favorita de quienes buscan un calzado versátil y fácil de usar. Sin embargo, una tendencia inusual ha comenzado a surgir entre sus usuarios más devotos: tras meses de uso continuo, muchos notan que sus pies parecen haber crecido.
¿Podrían los Crocs estar realmente relacionados con el crecimiento del pie? Este intrigante cambio ha llevado a expertos en podología a investigar la relación entre el tipo de calzado y la forma de los pies.
A través de TikTok y otras plataformas, los usuarios han compartido experiencias similares, dando lugar a preguntas sobre si la estructura de los Crocs podría estar provocando estos cambios.
¿Son los Crocs responsables del cambio en el tamaño del pie?
Ricky Lee, podólogo consultado por el portal Body+Soul, señala que este fenómeno no se debe únicamente al uso de Crocs, sino a las características estructurales.
El experto afirma que "nuestros pies cambiarán de forma con el tiempo... no necesariamente debido a una marca de calzado en particular, sino al uso de calzado más ancho y menos estructurado”.
Según Lee, este tipo de calzado permite una mayor expansión de los músculos del pie, lo cual puede llevar a una leve modificación en su forma, especialmente si se usan por largos períodos.

Los podólogos lo confirman: los Crocs están relacionados con el crecimiento del pie
Además, el podólogo destacó que pasar largos periodos descalzo o con zapatos planos o anchos podría ser un factor de contribución en estos cambios, aunque aclaró que no todos los usuarios experimentarán un crecimiento en el tamaño del pie.
El cambio en la forma de los pies a lo largo del tiempo es un fenómeno natural, y el uso de calzado amplio y sin estructura solo es uno de los factores que pueden contribuir a esta variación.
Asimismo, destacó que el calzado tradicional también puede deformar los pies y limitar su desarrollo normal el ciertos casos. Además, Lee señaló que otros factores, como el embarazo, también pueden influir en la forma de los pies debido a la hormona relaxina.
Recomendaciones para mantener una buena salud podal
Para quienes deseen evitar posibles cambios en la forma de sus pies debido al uso de calzado de horma ancha, los expertos en podología sugieren algunas prácticas preventivas:
- Alternar el calzado: es recomendable variar entre zapatos estructurados y aquellos más relajados o de horma ancha para ayudar a mantener un equilibrio en la forma del pie. Esto puede prevenir que el pie se ensanche o cambie de forma con el tiempo.
- Ejercicios para fortalecer los pies: los ejercicios que fortalezcan los pequeños músculos del pie ayudan a mantener una estructura sana. Actividades simples como mover los dedos y flexionar el arco del pie contribuyen al fortalecimiento de la musculatura.
- Consultar a un especialista: ante cualquier inquietud sobre el efecto del calzado en la forma del pie, es aconsejable visitar a un podólogo. Este profesional puede brindar recomendaciones específicas y personalizadas.

Los podólogos lo confirman: los Crocs están relacionados con el crecimiento del pie
- Elección adecuada del calzado: seleccionar zapatos con buen soporte, especialmente para actividades de larga duración o alto impacto, es clave. El calzado debe ser de la talla correcta, sin quedar ni muy suelto ni muy ajustado.
- Revisar el estado del calzado: es importante revisar regularmente el calzado y reemplazarlo cuando esté desgastado, ya que esto asegura que el pie tenga el soporte adecuado.
- Evitar el uso prolongado de calzado inadecuado: si bien puede ser tentador usar Crocs o calzado similar todo el tiempo por su comodidad, es importante limitar su uso a actividades que no requieran estar de pie por períodos largos.
- Uso de plantillas ortopédicas: las plantillas de soporte pueden ser beneficiosas para quienes usan calzado ancho, ya que ayudan a mantener la estructura del pie sin importar el tipo de zapato.